Los contratos diferidos, conocidos como Forwards y Futuros, son instrumentos financieros que permiten a dos partes acordar una transacción comercial en el futuro. En el momento inicial de la negociación, se establecen las condiciones clave, como el precio al que se realizará la transacción, las características del bien que se entregará (activo subyacente) y la fecha de entrega. En el momento de vencimiento, ambas partes están obligadas a cumplir con la transacción, que puede ser liquidada mediante la entrega del bien o por diferencias, dependiendo del tipo de derivado.
En los mercados financieros, existen diferentes tipos de mercados, como el mercado de contado (SPOT), donde se fijan los precios de los productos que se entregan de inmediato, y los mercados diferidos, como el mercado Forward y el mercado de Futuros, donde se establecen precios para entregas futuras.
Dentro de los contratos diferidos, podemos encontrar dos categorías principales: los Forwards y los Futuros. Los Forwards son acuerdos personalizados entre las partes y se negocian en el mercado OTC (Over The Counter), mientras que los Futuros se negocian en mercados organizados, como las bolsas, bajo reglas establecidas. En los Futuros, las partes suelen realizar un depósito de garantía y los contratos son estandarizados, lo que facilita su negociación.
En cuanto al activo subyacente de los contratos diferidos, este puede ser muy variado, incluyendo commodities (cereales, metales, petróleo), divisas, tasas de interés e índices. Inicialmente, el mayor volumen de operaciones correspondía a los commodities, pero en la actualidad, los derivados financieros sobre activos financieros han ganado mayor relevancia en los mercados.
La función económica de los mercados de Futuros es fundamental para la economía, ya que permiten transferir el riesgo de variación de precios entre los diferentes agentes económicos. Por ejemplo, un productor puede transferir el riesgo de fluctuación de precios a un especulador dispuesto a asumirlo. Además, los mercados de Futuros revelan expectativas sobre los precios futuros de los activos, lo que ayuda a los participantes a tomar decisiones informadas.
En el caso de los commodities, debido a su naturaleza física, presentan características y participantes específicos en los mercados de Futuros. Los productores, mayoristas, industriales, exportadores, importadores y especuladores son algunos de los agentes involucrados en la negociación de contratos diferidos sobre commodities. Cada uno de ellos busca cubrirse ante posibles variaciones de precios en el mercado, utilizando estrategias como posiciones largas o cortas en Futuros, opciones de compra o venta, entre otros.
En resumen, los Forwards y Futuros son herramientas clave en los mercados financieros, que permiten a los participantes gestionar el riesgo de variación de precios y obtener información sobre las expectativas futuras del mercado. Su uso adecuado puede contribuir a una mayor eficiencia y estabilidad en la economía global.